Como os comentamos, el pasado día 13 de Febrero pudimos realizar una pequeña sesión de fotografía a Javier Krahe momentos antes de su concierto en el Gran Teatro de Cáceres.
Sabíamos que estábamos citados los compañeros de Live Cáceres y nosotros antes de la prueba de sonido. Mientras Live Cáceres le entrevistaba en su camerino y viendo que el escenario estaba completamente montado (demasiados elementos para sacar una fotografía como teníamos en la cabeza) decidimos montar los flashes (un Nikon SB-900 y un Nikon SB-700) en la tercera fila de asientos del patio de butacas. Habíamos buscado previamente referencias de retratos que nos gustaran y que cuadraran con la personalidad que se le intuye a Javier. Además habíamos leido en algunos medios la posible relación entre el título de su último disco, Las diez de últimas, y su retirada de los escenarios (que esperemos que no). De cualquier modo, eso nos hacía buscar un cierto gesto de nostalgia mezclado con una sensación de «trabajo bien hecho».
Sabíamos que queríamos un fondo oscuro. La poca iluminación del patio de butacas ayudaba a conseguirlo. Lo primero fue regular ISO, Diafragma y Tiempo de exposición de manera que la luz ambiente quedara como se deseaba. Buscábamos poca profundidad de campo para destacar (además de con la luz) al retratado sobre el fondo. Nos fuimos al extremo (f/2.8) sabiendo que el Nikon 24-70 mm f/2.8 se comporta bastante bien incluso en ese punto. Para tener margen hasta llegar a la velocidad de sincronización configuré el tiempo de exposición a 1/125 y ajusté el ISO (procurando mantenerlo bajo) para tener cierto detalle de las butacas pero mantenerlas oscuras: ISO 640. La D800 trabaja bastante bien en ese rango sin sacar ruido.
Hecho esto, introduje una luz relativamente «suave». El SB700 con un paraguas blanco, cerca del sujeto, a 3/4 a la izquierda. Medí con el fotómetro donde se sentaría después Javier y regulé la intensidad hasta obtener una medición de 2.8
Encendí el segundo flash, a la derecha, aunque un poco más lateral que la anterior. En este caso el SB900 con un snoot para que perfilara el lado opuesto a la luz principal. Se midió y regulo la intensidad a 4 (2.8 más 1 punto) para crear una luz dura que perfilara y se apuntó un poco más atrás de donde se sentaría Javier.
Realmente no había una zona donde ambas fuentes fueran a coincidir por lo que no fue necesario tener en cuenta la suma de luces para este esquema.
Con todo preparado y habiendo terminado Javier con la entrevista de Live Cáceres y la prueba de sonido, le pedimos que se sentara y comenzamos con las primeras fotografías. Pudimos estar sólo 5-10 minutos debido a que los compañeros de Canal Extremadura necesitaban entrevistarle también antes del concierto, pero tuvimos tiempo de cambiar un par de veces de pose y regular de 2 formas distintas los flashes.
Con simplemente subir el paraguas un poco por encima de la cabeza de Javier y subirle 1/3 la potencia conseguimos una luz cenital que utilizamos para la fotografía que ahora veis en blanco y negro.
Javier nos dejó hacer sin pega ninguna, encantador y permitiéndonos en muy poco tiempo cambiar varias veces la pose para así tener más variedad.
Cuando terminamos, recogimos el equipo de iluminación, que no son pocos trastos y aprovechamos las primeras canciones del concierto para sacar algunas fotografías más y así completar los retratos.
Personalmente estoy bastante contento con los resultados y creo que él también 😉
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